Trastornos digestivos: Aprende a evitarlos y a tratarlos

25/08/2016

TRASTORNOS DIGESTIVOS ESTIVALES

A todos nos gusta el verano: llega el buen tiempo, los días son más largos y nos vamos de vacaciones. Sin embargo, en esta época son más frecuentes algunos trastornos digestivos que es mejor conocer y prevenir para que nuestras deseadas vacaciones no se estropeen. Os vamos a hablar de tres de ellos: la gastroenteritis, los cortes de digestión y las digestiones pesadas.

 

GASTROENTERITIS VÍRICA

El calor favorece el crecimiento de las bacterias y virus que contaminan los alimentos y causan la inflamación del estómago y del intestino. Se manifiesta por diarrea, náuseas, vómitos, retortijones, inapetencia y, a veces, fiebre. Suele durar 2-3 días.

¿Cómo se previene?

  • Extrema la higiene. Lávate las manos antes de cocinar y de comer, lava bien los utensilios que uses, lava las frutas y las verduras.
  • Refrigera los alimentos y no los dejes nunca fuera de la nevera.
  • Cuando viajes, no comas alimentos crudos, pela la fruta, evita las bebidas no embotelladas y el hielo.

 

¿Cómo sobrellevarla?

  • Es fundamental prevenir la deshidratación. Para ello, toma suero de hidratación en pequeñas cantidades y aumenta poco a poco. Si vomitas, espera 30 minutos y vuelve a empezar más despacio.
  • Los refrescos y los zumos de fruta no deben utilizarse, pues no reportan los minerales perdidos y pueden empeorar la situación.
  • No interrumpas la alimentación, a no ser que tengas muchos vómitos. Come poca cantidad, pero varias veces al día. Sigue una dieta astringente: patata, zanahoria, arroz, pollo, pescado, manzana, plátano, yogur etc.
  • No tomes antibióticos ni antidiarreicos por tu cuenta.
  • Si tras varios día se mantiene el malestar, consulta con tu médico o farmacéutico.

 

CORTE DE DIGESTIÓN

¿Obligas a tus hijos a esperar dos horas antes de bañarse después de comer? ¿Tiene esa práctica una base científica?

Lo que conocemos como corte de digestión (nombre inapropiado, pues la digestión no se paraliza) se llama, en realidad, hidrocución y es debido a un reflejo del sistema cardiovascular como respuesta a un cambio muy brusco de temperatura. Se produce una sensación de malestar con dolor abdominal, náuseas, vómitos, mareos e incluso pérdida de conciencia.

 

¿Cómo prevenirlo?

No hay estudios que avalen las siguientes recomendaciones, pero el sentido común hace que los organismos de salud las promuevan:

  • Minimizar la diferencia de temperatura entre el cuerpo y el agua: en vez de zambullirse, es mejor meterse poco a poco.
  • No tomar el sol ni hacer ejercicio físico antes de bañarse.
  • Si la comida ha sido copiosa, es recomendable esperar antes de entrar en el agua.

 

DIGESTIONES PESADAS

Los excesos del verano (además de acabar con la operación bikini de los meses previos) provocan malestar y pesadez. Algunos consejos de sentido común para disfrutar de los días de verano:

  • Evita las comidas copiosas.
  • Come despacio y mastica bien.
  • Los refrescos con gas y el exceso de azúcar favorecen los gases, y el café, el té, los condimentos fuertes y los picantes irritan el estómago.
  • La siesta mejor si es corta (30 minutos).
  • Cena temprano para no acostarte sin haber hecho la digestión.

 

Todos estos consejos se resumen en uno: ¡Modérate! Los hábitos saludables y el verano sí son compatibles.