Hongos: qué son y cómo prevenirlos

09/01/2016

Los hongos son seres vivos con gran capacidad de adaptación que pueden desarrollarse sobre cualquier medio o superficie. Se reproducen por medio de esporas, que son diseminadas principalmente por el viento o el agua, y no son capaces de producir su propio alimento. Precisamente esta incapacidad para crear sus propios nutrientes es la causa de que los hongos puedan ser beneficiosos o perjudiciales para la salud, ya que siempre buscan dónde obtener su alimento.

En medicina han tenido y tienen un papel muy importante, ya que por ejemplo la era de los antibióticos se inicia con el descubrimiento de la penicilina, obtenida a partir del hongo Penicillium notatum. En otros ámbitos como la alimentación, los hongos también aportan beneficios en productos como los quesos, la cerveza o el vino y son, además, una excelente fuente de vitaminas, proteínas, fibra y minerales.

Sin embargo, también son la causa de enfermedades llamadas micosis y que afectan principalmente a las capas externas del cuero cabelludo, la piel, las uñas o las mucosas, sobre todo en época de calor. Los principales tipos de micosis externas son:

Micosis por dermatofitos

Se conocen vulgarmente como tiñas.  Afectan a la piel, el pelo y las uñas, ya que los dermatofitos se alimentan de la queratina presente en estas zonas. Habitualmente se contagian por contacto directo entre personas y animales, y son más frecuentes en lugares con mucha humedad y calor.

Las más comunes son:

  • Pie de atleta: Se manifiesta por picor y grietas entre los dedos de los pies, aunque puede afectar a toda la planta.
  • Tiña corporal: Aparece en forma de anillos, con descamación y enrojecimiento en sus bordes.
  • Tiña del cuero cabelludo: Hay diferentes tipos. Las más frecuentes se caracterizan por lesiones descamativas, caída del cabello y picor. El querion de Celso (más grave) se presenta como una placa  inflamatoria con pus, puede acompañarse de fiebre y producir alopecia cicatricial definitiva.
  • Tiña inguinal: Afecta a la zona genital, es más común en los hombres y presenta inflamación, enrojecimiento y picor.

Candidiasis 

Provocadas en su mayoría por el hongo Candida albicans, incluyen infecciones que afectan a:

  • Mucosas, tanto en la boca como en la zona genital: Cursan con inflamación, picor,  quemazón y placas blanquecinas. Las candidiasis vaginales producen un flujo blanquecino, parecido al requesón.
  • Piel: Afectan a las zonas con pliegues —como las axilas, el área submamaria, las ingles y los espacios entre los dedos—, donde la humedad es mayor. Causan enrojecimiento, picor y quemazón.
  • Uñas: Se conocen como onicomicosis y se caracterizan por manchas y alteraciones en la forma de la uña. También pueden estar ocasionadas por hongos dermatofitos e incluso por mohos.

Cómo prevenir la infrección por hongos

La prevención de las infecciones por hongos pasa por:

  • Evitar el contacto directo con personas y animales infectados.
  • Usar chanclas en saunas, piscinas, gimnasios, etc.
  • Secarse muy bien la piel y sus pliegues.
  • No compartir la toalla ni utensilios personales.
  • Usar ropa ligera y no ajustada y cambiarse a diario la ropa interior.
  • Utilizar preservativo en las relaciones sexuales.

En la actualidad existen tratamientos — los fármacos antimicóticos — muy eficaces contra los hongos, aunque requieren ser muy constantes para eliminarlos por completo. No dejes de consultar a tu médico o farmacéutico para que te ayuden a encontrar la mejor solución a este frecuente problema.