Alimentación en verano: ¿qué alimentos aportan más vitaminas?

06/23/2021

El verano es una de las estaciones del año en la que más cambia nuestra alimentación. Con las vacaciones y el buen tiempo, nuestras rutinas se modifican afectando directamente a nuestra dieta. Por eso, durante esta estación resulta clave elegir alimentos de temporada ricos en vitaminas. Si además optamos por frutas y verduras, estaremos contribuyendo a mantener el nivel de hidratación de nuestro organismo.

Una despensa llena de vitaminas

El aporte de vitaminas a través de la alimentación es fundamental durante todo el año, pero muy especialmente durante los meses de verano. Y es que, durante esta temporada, las altas temperaturas y la exposición a los rayos del sol pueden hacer que nuestro organismo pierda agua. Para evitar la deshidratación y la pérdida de vitaminas, es fundamental consumir frutas y verduras de temporada ricas en:

  • Vitamina A. Clave para el buen funcionamiento del organismo, el consumo de esta vitamina resulta fundamental durante los meses más calurosos, ya que prepara la piel para la exposición solar. Puedes encontrarla en lácteos, carne, pescado y también en algunos alimentos de temporada como la zanahoria, el mango o el melón. 
  • Vitamina B. El calor del verano afecta directamente a nuestra energía y vitalidad, provocando que nos sintamos más cansados. Para evitar el decaimiento, nada mejor que consumir alimentos ricos en vitamina B ya que combate la anemia. La vitamina B está presente en frutas estivales como el níspero y en carnes y mariscos.   
  • Vitamina C. Aunque su popularidad aumenta en invierno, lo cierto es que durante el verano su consumo es clave para reforzar el sistema inmunitario. La encontrarás en el melón, el kiwi o el mango.
  • Vitamina D. Es la vitamina del verano, ya que se sintetiza a través de los rayos solares. Contribuye al mantenimiento de una buena estructura ósea. Estos son algunos alimentos ricos en vitamina D: productos de origen animal como carne, huevos o lácteos y setas.
  • Vitamina E. Este antioxidante natural es fundamental para proteger la piel de la radiación solar. Por eso, durante el verano es importante incrementar la ingesta de alimentos que la contienen, como las nueces o las semillas.

Alimentos de temporada cargados de vitaminas

A la hora de llenar la despensa, vale la pena optar siempre por alimentos de temporada. Estos son algunos alimentos que conviene tener incluir en la dieta durante los meses de verano.

  • Berenjenas y calabacines. Estas verduras, conocidas por su bajo aporte calórico, son además ricas en vitaminas claves para el organismo como son las vitaminas A, B, C y E. Además, mientras la berenjena aporta calcio, fósforo, hierro y antioxidantes, los calabacines suman además una alta cantidad de fibra y magnesio.
  • Melones y sandías. Las frutas más populares del verano contienen una alta cantidad de agua, lo que las convierte en frutas de bajo aporte calórico. Sin embargo, su principal virtud se esconde en su aporte vitamínico. Mientras que el melón es rico en vitamina C, clave para la absorción del hierro, la sandía también aporta vitaminas A y B. Ambas frutas son una importante fuente de fibra.
  • Zanahoria. Esta verdura toma su característico color del betacaroteno, un antioxidante natural clave a la hora de cuidar nuestra salud ocular. Además es rica en vitaminas A y C.
  • Frutas de hueso. El melocotón, la nectarina, la ciruela… Son frutas habituales del verano que bien vale disfrutar en temporada. Están cargadas de vitaminas entre las que destaca la vitamina C. Además, aportan antioxidantes, fibra y minerales como el potasio.

Hábitos de alimentación saludable durante el verano

Además de consumir alimentos cargados de vitaminas y minerales, durante la época estival es recomendable seguir estos consejos:

  • Mantenerse continuamente hidratado. Esta recomendación incluye limitar la ingesta de bebidas como el café e incrementar el consumo de infusiones y agua. En el caso de realizar ejercicio, es importante recuperar los niveles de hidratación, incrementando la ingesta de agua y de sales minerales.
  • Guardar los alimentos en un lugar fresco y seco, con el fin de asegurar su buen estado, mantener sus propiedades durante más tiempo y evitar intoxicaciones.
  • Tener siempre un snack a mano, especialmente en los días de más calor y durante las actividades practicadas al aire libre.