Los nutrientes clave en cada etapa del embarazo

17/02/2020
Necesidades nutricionales en cada etapa del embarazo

Uno de los aspectos más importantes para la salud durante el embarazo es la nutrición. Hay que tener en cuenta que, durante este periodo, la alimentación debe tener 4 objetivos básicos:

  • Cubrir las necesidades nutricionales de la mujer.
  • Cubrir las necesidades nutricionales del bebé
  • Preparar el organismo de la madre para el parto.
  • Asegurar una reserva nutricional adecuada para la lactancia.

No obstante, estas necesidades también van evolucionando a lo largo del embarazo, ya que algunos de los procesos que ocurren en determinadas etapas requieren una mayor cantidad de algunos nutrientes específicos.

A continuación, repasamos cuales son los nutrientes más importantes en cada etapa del embarazo:

Primer trimestre

Durante las primeras 12 semanas del embarazo, la gestante no necesita consumir más energía, aunque sí necesita más cantidad de algunas vitaminas. Por eso, hay que mejorar la calidad de la alimentación sin incrementar la cantidad.

Las siguientes vitaminas y minerales con mayor importancia en esta etapa son:

  • Ácido fólico. Está demostrado que una cantidad adecuada es imprescindible para prevenir la espina bífida y otros defectos de la formación de las primeras estructuras del sistema nervioso del bebé. De hecho, se recomienda aumentar el consumo de esta vitamina desde meses antes de la concepción, a menudo mediante un suplemento específico. El ácido fólico se encuentra principalmente en las verduras y hortalizas de hoja verde, como las espinacas, las acelgas o la rúcula. También son ricas en ácido fólico las lentejas, las judías pintas, los frutos secos, los cítricos y los cereales integrales.
  • Vitaminas B6 y B12. También están relacionadas con el desarrollo temprano del sistema nervioso. Ambas se encuentran en alimentos de origen animal y la vitamina B6, además, se puede obtener de frutos secos y legumbres.
  • Yodo. es fundamental para mantener un metabolismo activo y conseguir que las primeras fases del desarrollo embrionario transcurran adecuadamente. Se encuentra en los pescados, los lácteos y algunas algas, principalmente. También se puede aumentar su consumo mediante el uso de sal yodada en la cocina.
  • Omega-3 DHA. Este ácido graso de cadena larga forma parte de las membranas celulares y se acumula sobre todo en el cerebro y la retina. Por esta razón sus requerimientos aumentan durante el tercer mes de embarazo, cuando se desarrollan el cerebro y la retina del futuro bebé.

Segundo Trimestre

A partir del cuarto mes de embarazo, la mujer necesitará aumentar las calorías que ingiere, unas 200 Kcal al día. Esto se debe a que su metabolismo tiene un rendimiento acelerado y, por tanto, gasta más energía. Se recomienda que este incremento en las calorías se cubra mediante un aumento en la ingesta de legumbres, pasta, arroz y patata, sin caer en los dulces o en el exceso de grasas, que pueden conllevar problemas digestivos.

En esta etapa del embarazo gana importancia el hierro, ya que el volumen de sangre de la futura mamá aumenta y también debe aportar la cantidad que necesita el feto. Es muy posible que, en función del resultado de las analíticas que se realizan en este trimestre, recomienden un suplemento de hierro para tomar cada día.

Tercer trimestre

En la recta final del embarazo se mantiene un gasto energético superior, unas 300 Kcal por día. No obstante, en este periodo es recomendable aumentar la ingesta de proteínas en lugar de los carbohidratos, ya que son necesarias para el desarrollo del feto en la etapa en la que más está creciendo. Hay que procurar tomar legumbres (entre 2 y 4 veces por semana), huevos (2-4 por semana), lácteos (3 al día), pescados (3-5 por semana), mariscos (1-2 por semana) y carnes magras (4-5 por semana) para evitar el exceso de grasas.

Además de las proteínas, también hay que prestar atención a:

  • Las reservas de hierro de la gestante, ya que, además del desgaste propio del embarazo, hay que prever la pérdida de sangre durante el parto y los días posteriores. Es posible que, si no lo está tomando ya, se recomiende un suplemento de hierro.
  • Las necesidades de calcio, que aumentan debido a que el esqueleto del feto se osifica a mayor velocidad durante este trimestre. Esto, sumado a que una falta de calcio puede producir hipertensión en la futura madre, aumenta la importancia de este mineral en esta fase del embarazo. Por eso, se recomienda tomar unos 1200 mg de calcio al día durante el embarazo, es decir, entre 3 y 4 raciones diarias de lácteos.
  • El aporte de vitamina D, Es importante asegurar un correcto aporte de Vitamina D, ya que es esencial para la absorción y depósito del calcio en los huesos. Gran mayoría de la población española no ingiere las cantidades recomendadas de esta vitamina, por lo que puede ser necesaria la suplementación.
  • El consumo de fibra. En este trimestre del embarazo es muy frecuente el estreñimiento, ya que la presión que ejerce el útero en los intestinos y la acción de las hormonas se unen para reducir la velocidad del tránsito intestinal. Tomar más alimentos con fibra (cereales integrales, verduras y frutas) contribuye a reducir esta molestia.

Recuerda que, en general, las necesidades de todas las vitaminas y minerales se ven aumentadas durante la gestación. Los profesionales de la salud suelen recomendar una alimentación adecuada para cubrir estas necesidades y, además, un suplemento multivitamínico específico, como Gestagyn® embarazo, que garantice un correcto un aporte diario de los nutrientes más importantes para la salud de la madre y el bebé.